AURELIO ARTETA
Nacido en Bilbo, era hijo de Eusebio Arteta y Labrador y Petra Errasti y Zabala.
Comenzó sus estudios en la Escuela de Artes y Oficios de su ciudad natal y los continuó en la Academia de Bellas Artes de San Fernando, en Madrid.
En el año 1902 logró una beca de la Diputación de Bizkaia, la misma le fue dada por la obra Accidente de trabajo en una fábrica de Vizcaya.
Gracias a esta beca pudo viajar a Paris en donde tuvo la oportunidad de completar su formación. Fue ello lo que le permitió acercarse al impresionismo de la mano de Gaugin y Toulouse-Lautrec.
Tiempo después viajó a Italia, lo que le permitió entrar en contacto con el Renacimiento italiano. Luego retornó a Bilbo, donde alternó su labor como pintor con el diseños de carteles y participó junto a otros artistas de la "Asociación de Artistas Vascos".
Tres años después, en 1924, le fue encomendada la tarea de dirección del Museo de Arte Moderno de Bilbo, sin embargo por diferencias con el ayuntamiento, debió dejar su cargo. Este hecho tuvo derivaciones políticas vinculadas con la política de la dictadura de Primo de Rivera.
En 1930 recibió el Premio Nacional de Pintura.
Hacia el exilio en México
Cuando dio inicio el proceso que derivaría en un golpe de Estado y Guerra Civil, el pintor se encontraba en Madrid, debiendo salir el 1º de diciembre de ese mismo año.debió abandonar la ciudad para dirigirse hacia Valencia, donde realizó un cartel de apoyo al gobierno vasco. Desde allí pasó luego a Biarritz y Burdeos, para finalmente tomar el vapor Sinaia, en el que se trasladó a México, donde murió años después.
Hacia el exilio en México
Cuando dio inicio el proceso que derivaría en un golpe de Estado y Guerra Civil, el pintor se encontraba en Madrid, debiendo salir el 1º de diciembre de ese mismo año.debió abandonar la ciudad para dirigirse hacia Valencia, donde realizó un cartel de apoyo al gobierno vasco. Desde allí pasó luego a Biarritz y Burdeos, para finalmente tomar el vapor Sinaia, en el que se trasladó a México, donde murió años después.
Su obra
Su obra pone el acento de manera especial en el tema vasco, tanto en el medio rural como en el proceso de industrialización. teñida de una gran melancolía, cultiva con preferencia el tema vasco, tanto el eminentemente rural como la transformación de esa sociedad a la industrialización. En este último caso, la ría del Nervión cobra especial relevancia.
El crítico Juan de la Encina dijo de él: «En tiempos en que el charlatanismo y la vanidad son y han sido haciendas en explotación, por una parte, no podemos por menos de aplaudir el recogimiento de Arteta (...)"
También Aurelio Arteta ilustró libros, como fue por ejemplo el caso de Divagaciones de un transeúnte de Alejandro de la Sota.
En las primeras décadas del siglo XX Arteta realizó paisajes urbanos; obras de este período son por ejemplo El puente de Burceña, Barrio obrero o La calle. Pinturas que ponen en evidencia su vocación por el realismo social.
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| Ilustración para el libro Divagaciones de un transúnte |
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| Romería en Durango |
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| Coloquio en los campos de sport |
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| Maternidad |
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| Muchachas en el monte |
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| Romería vasca |
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| El puente de Burceña |
También existen varios trabajos en los que refleja la ciudad de Bilbo con imágenes de su burguesía, tal es el caso de El Campo Volantín desde mi estudio.
Sin lugar a dudas el contraste entre el paisaje rural y el urbano, en avance y crecimiento, era un tema que lo preocupaba y sobre el que reflexionó a través de su arte.
En el año del centenario de su nacimiento (1979) el Banco de Bilbao celebró dos exposiciones, una en el Museo de Bellas Artes de Bilbao y otra en la sede de la entidad. Para su organización se requirió de la colaboración de diferentes personas que escribieron textos; tal fue el caso de Indaalecio Prieto, Manuel Llano, Kosme Barañano y Edorta Kortadi.
La realización del mural del vestíbulo del Banco de Bilbao, al que hemos hecho referencia unos párrafos antes, fue todo un desafío para el que se preparó de manera esmerada. Vinculado con esta necesidad de experimentar para luego aplicarlo en los murales, se encuentran obras como En la romería. A través de ella pudo adquirir soltura y habilidad con la técnica del «buon fresco».
La realización del mural del vestíbulo del Banco de Bilbao, al que hemos hecho referencia unos párrafos antes, fue todo un desafío para el que se preparó de manera esmerada. Vinculado con esta necesidad de experimentar para luego aplicarlo en los murales, se encuentran obras como En la romería. A través de ella pudo adquirir soltura y habilidad con la técnica del «buon fresco».
La superficie que debió pintar tenía ochenta metros cuadrados y se encontraba dividida en doce secciones: El trabajo intelectual, El sembrador, también conocido como La agricultura, La recolección, Los cargueros del muelle, El astillero, La fundición, El ferrocarril, Pesquero de arribada, Pescadores en el muelle, La mina y Las Artes
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| La mina |
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| Calle de la estación |
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| La retaguardia |
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